Grrr!

…del amor y del odio.

Me enseñaste a quererte y a vivir contigo pero no me enseñaste a hacerlo sin ti. Gracias. Si, gracias. Por una vez más hacerme caer en cuenta que el mundo está lleno de mierda, que no se puede confiar en nadie, por hacerme ver que soy burda de ingenuo, por volverme un llorón de mierda a través de un blog, por convertirme en un patético cabròn que no confía en nadie, por dejar de preocuparme por los demás (como todo el mundo), gracias por convertirme en una persona más y me hiciste dejar de ser yo, el bicho pana, medio tonto pero pana al fin y convertirme en, algo, aun no se qué es. En fin, no entiendo como alguien puede ser tan hipócritamente falso como para entrar en un papel que te haga creer una vaina que no se le acerca en un pito a la realidad. Qué duro ¿cierto? Me arrecha, me impresiona, me deja sin palabras y sin ganas de nada, la forma como sencillamente la gente finge, ¿cómo lo hacen? De verdad quiero aprehender a hacerlo, se aceptan sugerencias. ¿Mi error? Si, no soy perfecto, y si, fue uno honesto, no soy una víctima, soy la consecuencia inevitable a todo este peo. Ahora, ¿cómo lo sé? Cuando uno siente algo, esto sencillamente no se desvanece, por el contrario: prevalece. Tanta paja que hablabas de esto y aquello y resultaste igual o peor, perdona si me equivoco pero me apoyo en lo que veo, en lo que pienso, en lo que sé, en lo que eres, en lo que me hiciste hacer, en lo hechos pues, en lo superficial, lo que de verdad vale. Lo cierto; no existe ningún grado superlativo de profundidad interior ni nada de esa mierda, los sentimientos y vainas profundas como esas sencillamente no existen, son sólo reacciones ante una acción, no más no menos; es decir, es NADA, es algo que no es. Es decir, todo. Una deducción lógica, y es mía, así que no tienes el puto derecho de venir a decirme que es mentira, porque es mi verdad, una verdad, ergo, la verdad, definitivamente es todo a lo que se reduce el pensamiento racional, lógico y supuestamente profundo, a través de eso mismo llegas a la conclusión que todo el mundo sabe pero no quiera aceptar y lo disfraza poniéndole nombres a las cosas, fuck, qué mala costumbre, es nada, ¿para qué carajo meterse en algo que no es nada? ¿Para qué seguir? Exacto, las metas ya no lo son, definitivamente sólo vivo, pienso porque es inevitable, por esto existo y me ladilla. What the hell, soy así… no sé… que falsedad, que hipócrita, que… nada.

M.A.M.I. Tengo miedo...

Quisiera despedirme, quisiera tener el tiempo para hacerlo, que me lo permitas; no te imaginas cuánta ambigüedad hay en cada palabra que he escrito hasta ahora, y apenas va el título y un par de líneas, la realidad es que no se cómo escribirte esta carta que tal vez nunca leas, no se como iniciar, es probable que decida un inicio cliché o algo totalmente inútil y que no tenga nada que ver o quizá un chiste o una parábola, pero dudo que capte tu atención porque odias los chistes sobre los temas serios, cosa que es un escape para mi, con eso evito la realidad y la seriedad del asunto, el que quiera que sea; el hecho es que ya inicié esta cuestión y no se que más decirte, apartando lo que ya sabes (todo); y no se si por desgracia o por dicha, nunca dejaré de sentirlo pero estés donde estés, estés con quien estés, estés como estés, esta carta va dirigida a ti. No te la mando porque es probable que te rías, te burles, me critiques o ni siquiera la leas y la botes. Todo esto por que sencillamente no entiendes y no te molestas en hacerlo. Tus razones tendrás; no entiendes la razón de mi actuar errático, de mi locura, si se quiere porque no tiene otra explicación, no entiendes que no quiera saber nada de ti, y muy dentro de mi esté muriendo por saberlo todo ¿miedo? pero ¿por qué? Tal vez te preguntarás, si, tengo miedo de ti, por lo que te convertiste en algún momento, tengo miedo de lo que ha pasado en tu vida durante mi ausencia, y también de lo que no ha pasado, me asusta lo que puede estar pasando por tu cabeza, tus pensamientos, tus gustos, si habrás cambiado tanto que ya no te conozco y le estoy escribiendo esto a alguien que no se quién pueda ser, tengo miedo y me frustra porque también quiero saber de ti, me molesto y me da arrechera saber que ya no estoy en tu vida, me molesta que decidas escapar para otro lado que quizá piensas será mejor y ojala, eso te deseo pero la realidad es otra y tu sola tienes que descubrirlo porque la experiencia es individual y un consejo, no es más que eso. Me molesta saber que dejaste perder una vaina tan depinga, a causa de otra tontería más y muchas veces olvido por qué carajo ocurrió todo esto, cuál es la razón de esta fucking desdicha, una vaina tan tonta que resultó ser importante, y me hace un objeto merecedor de burlas de conocidos de la cuestión o tal vez sea mi versión de los hechos que les causa risa, no se, tal vez soy tan imbècil que en realidad merezco esa burla, no lo se, desde que decidiste irte (de mi y de aquí), por la razón que fuera, por la que creas que es, ya no estoy seguro de nada, no estoy seguro ni me mí mismo, de que existo, he optado por pensar que lo relativo de las cosas es lo cierto: ¿2+2=4? Ya no lo creo, puede ser 5 y todo este tiempo nos han estado engañando ¿quién? Pues he allí la verdadera pregunta.
Quisiera saber todo lo que tienes que decir, quisiera que supieras todo lo que digo pero es eso mismo, el miedo, tengo miedo, te tengo miedo y por eso odio. Hiciste que me alejara de ti, a pesar que quiero estar a tu lado acompañándote a cada paso que des, aconsejándote y dándote todas las vainas bonitas que puedan salir de mi, para ti, solo para ti, pero el miedo me paraliza y me impide ser racional y lógico en las cuestiones que te implican, y resulta de una vaina tan sencilla, a un caos catastrófico y universal y es allí cuando me siento como “Fernando Furioso”, sentado en mi cama, en “un trozo de Marte, pensando y reflexionando” y me doy cuenta que todo es una gran tontería, una niñada y no entiendo como puede ser algo tan grande dentro de mi, tanto así que distorsiona mi mundo y me rompe las bolas y sin darme cuenta me está matando por dentro, literal y metafóricamente hablando, y es ahí cuando caigo en cuenta y agradezco a Dios, a la vida o a quién sea que es el responsable, que cada día más, es un día menos y me doy cuenta que ya queda poco tiempo y el tiempo es oro porque a fin de cuentas es todo lo que tenemos y es lo único a lo que deberíamos aferrarnos, quiero dejar de tener miedo, quiero leer y saber todas tus cosas, quiero ver fotos de ti, quiero dejar de actuar tan estúpidamente, quiero borrarte de mis sentimientos tal cual tu lo hiciste, si es que alguna vez en realidad sentiste algo por mi, no te digo esto como un bicho que te quiere hacer daño, te lo digo como un bicho que te quiere y confiesa cómo se siente, que quiere un consejo de su pequeña y sabia amiga, quiero sentir un abrazo, no tienes idea de lo que daría por un simple abrazo, no entiendo como algo tan sencillo y que de la mayoría de la gente me repugna, me resulta algo tan… TODO… si, lo podría ser todo para mi, tanto así que resulta ser un sueño, una meta inalcanzable porque es imposible, ser tu amigo, es imposible, imposible… es una carta totalmente imposible tanto así que te la escribí y no te llega, no te llega porque no me atrevo a mandártela, otra vez por el miedo, y que ladilla que cualquier extraño que esté leyendo esto y probablemente esté diciendo “pobre perdedor”, y eso resulto ser, un perdedor, porque perdí todo lo que podía tener, lo único que me daba fuerzas y todo para poder seguir: a ti…